Entrevistas

• ¿Qué es lo que más te gusta de tu oficio?

  Es una profesión especial, exigente tanto física como mentalmente. Tenemos que resolver muchos problemas técnicos y realizar investigaciones históricas: implica investigación y experimentación continuas. Sobre todo, me encanta que sea como entrar en otra era histórica.

• ¿Resolver problemas significa innovar?

  Sí, definitivamente hay espacio para la innovación, ya que las necesidades de los músicos hoy en día son muy diferentes a las del pasado. Los artistas viajan mucho en avión; pueden cambiar de continente y de clima en pocas horas.

• ¿Por qué hay tantas réplicas y también falsificaciones?

  Los secretos de los antiguos maestros se han perdido y estamos intentando recrear sus diseños. Aunque los músicos necesitan nuevas soluciones, adaptadas a los nuevos estilos de vida, las piezas antiguas parecen mejores, pero han sido modificadas a lo largo de los siglos.

• ¿Qué es el proyecto Violino del mare?

  Nació en mi taller de lutería en la cárcel de la Ópera: fabricamos instrumentos de cuerda a partir de barcos hundidos o confiscados en Lampedusa, utilizados por contrabandistas en el Mediterráneo. Estos instrumentos simbolizan que no debemos tirar nada, y mucho menos a las personas.